Todos ansiamos tener unas pestañas de infarto, sin embargo, la máscara de pestañas no consigue el efecto que deseamos.

O bien porque buscamos algo más natural, o bien porque queremos dejar de utilizar la máscara de pestañas durante una temporada.

Para ello, podemos optar por distintos tratamientos y elegir el que mejor se adapte a nosotros.

Entre los tratamientos más demandados y con mejores resultados, encontramos: la permanente de pestañas, el lifting de pestañas y las extensiones de pestañas.

Por un lado, la permanente de pestañas, es ideal para los que buscan conseguir unas pestañas largas y curvadas.

Para ello, se aplica un líquido sobre ellas y se enrollan en un aparato especial, el cual aplica presión y temperatura, consiguiendo así el efecto deseado, y que se mantendrá alrededor de 3 meses.

Lo bueno de la permanente de pestañas es que se trata de un tratamiento indoloro, que tarda entre 30 y 45 minutos, además de conseguir sus efectos de forma inmediata.

Con este tratamiento nuestros ojos se verán más grandes y nuestras pestañas más gruesas, además, nos permitirá olvidarnos del maquillaje, ya que, nuestros ojos lucirán siempre maquillados.

A diferencia del lifting de pestañas, el cual alarga las pestañas desde la raíz, perfecto para aquellos que no poseen unas pestañas muy largas.

El tratamiento consiste en aplicar un pegamento en las pestañas y estirar las mismas elevándolas hacía el párpado, dejándolo actuar, aproximadamente 1 hora.

Una vez, transcurrido el tiempo se despegan las pestañas y se aplica una base preparada con vitamina y queratina, la cual nutre la pestaña y aporta grosor.

Al contrario de lo que puede parecer, es indoloro. Y, además, la duración del tratamiento es de aproximadamente 2 meses.

No obstante, si lo que deseamos es tener más cantidad de pestañas, podemos optar por la técnica de la extensión de pestañas pelo a pelo.

Se trata de una técnica indolora, pero puede resultar incómoda, debido a que, tarda entre 40 y 90 minutos, pues se requiere de mucha precisión.

Ya que, se deben elegir las pestañas naturales más gruesas para pegar allí la extensión, con el pegamento que, aunque es médico y está homologado, no puede entrar en el ojo.