MICROPIGMENTACIÓN DE LABIOS: SIEMPRE ESTUPENDOS

Cuando hablamos de micropigmentación, los tratamientos más demandados son las cejas y los labios.

Hay que decir que, los labios son una de las zonas más difíciles de micropigmentar.

Esto se debe a que, en ellos podemos encontrar 3 tipos de pieles distintas, la semimucosa labial, el borde o perfilado, y la piel del contorno labial.

Cada una con sus características correspondientes. Es recomendable conocer las características de cada una antes de realizar cualquier tratamiento.

Por un lado, la semimucosa labial se caracteriza por su color rosado, el cual suele variar de más intenso a más frío. En ella no encontraremos folículos pilosos, por lo que el color no perdurará durante mucho tiempo.

En cambio, en el borde o perfilado los resultados de color resisten más tiempo, aunque no tanto como en otras zonas del cuerpo. Por ello, para conseguir una mayor fijación del color debemos estirar muy bien la piel durante el procedimiento.

Por otro lado, la piel del contorno labial, es una piel como la de cualquier otra zona del cuerpo. Esto quiere decir que la fijación que se obtiene es muy buena. Esta zona suele trabajarse en micropigmentación cuando se desea un aumento de labios.

Conocer estas características es necesario para saber qué zona mantendrá durante más tiempo el color y en cual se requerirán más retoques.

Un aspecto a tener en cuenta a la hora de escoger los colores de pigmento adecuado es el color natural de la mucosa, según el resultado que pretendamos conseguir. Ya que, los colores más demandados son los rosados y tejas.

De hecho, se suele aconsejar elegir colores similares al color natural de la mucosa.

Evitando colores marrones, ya que, tras aplicarlos sueles tornarse más oscuros, llegando a ser demasiado oscuros.

Asimismo, cuando un cliente presenta una mucosa de color frío, que torna a azulada, debemos tener en cuenta que las tonalidades rojas o granates, suelen adquirir un tono violáceo.

Para ello, debemos añadir matices naranjas al pigmento para contrarrestar el efecto.

Si un cliente no acostumbra a maquillarse a menudo, se recomienda no subir más de un tono la intensidad del perfilado.

Además, se debe difuminar el perfilado en dirección a la semimucosa, gradando de fuera hacia dentro en uno o dos tonos más claros.

Por último, hemos de añadir que, la micropigmentación labial suele aplicarse cuando se pretende:

  • Perfilar y difuminar labios.
  • Aumentar el volumen de los labios, mediante un efecto óptico.
  • O corregir labios desdibujados, asimétricos o con arrugas.